Tipos de naves industriales
Una nave industrial es un edificio en el que se realizan actividades industriales como la producción y/o almacenaje de bienes industriales, maquinaria, mercancías, etc. Su forma, sus dimensiones y su estructura viene dada por el tipo de actividad económica que se realiza en su interior. Por ello, antes de empezar a buscar una nave industrial a la venta es fundamental conocer las tipologías que existen y cuál se adapta mejor a las necesidades de la actividad que se va a desarrollar dentro de la instalación.
Clasificación de naves industriales
Existen varias tipologías de naves industriales, las clasificaciones más habituales suelen ser según su estructura y según el Reglamento de Seguridad contra Incendios en los Establecimientos Industriales (RSCIEI).
Tipos de naves industriales según su estructura
La clasificación por estructura se establece según los materiales utilizados para la construcción de la nave industrial. Se pueden resumir en tres categorías fácilmente: de hormigón, metálicas y mixtas.
Naves industriales de estructura de hormigón:
La estructura de hormigón es la más rígida. Tanto el tiempo como el precio de construcción de este tipo de naves es más elevado que en el resto de estructuras. Su mayor rigidez permite una mayor facilidad para construir subestructuras o encofrados. Además, es la estructura que mejor se comporta ante el fuego sin necesidad de ningún tipo de tratamiento. Otra de sus ventajas es que no es necesaria la pintura ni la aplicación de tratamientos para prevenir la corrosión o el óxido.
Naves industriales de estructura metálica:
El tiempo y precio de construcción es bastante inferior a una nave de hormigón, gracias al poco peso de los materiales y la facilidad a la hora de transportarlos. Es la opción perfecta si estamos buscando una nave industrial barata, pero, como contrapartida se obtiene una estructura menos rígida, que dificulta los encofrados e impide la construcción estructuras hiperestáticas.
Su resistencia ante el fuego no es tan buena como las naves industriales de hormigón, por lo que según el tipo de actividad que se vaya a desarrollar requiere un recubrimiento ignífugo para evitar la rápida propagación del fuego en caso de incendio. Además, con este tipo de estructuras es más fácil conseguir espacios amplios y bien iluminados, de hecho, es habitual encontrarlas normalmente en la industria ganadera.
Naves industriales de estructura mixta:
La estructura mixta se sitúa en un punto intermedio entre la de hormigón y la metálica. Se trata de una estructura formada por la combinación de los dos materiales, hormigón y acero. Este tipo de estructura ha ido ganando popularidad debido a la buena rigidez que ofrece, a un coste menor que la estructura de hormigón, y a la flexibilidad a la hora de combinar materiales prefabricados, reduciendo así su tiempo de construcción.
Tipos de naves industriales según el Reglamento de Seguridad Contra Incendios en los Establecimientos Industriales
El RSCIEI establece cinco tipos de naves industriales según la facilidad de propagación del fuego con respecto a los edificios colindantes. Cada tipo de nave dentro de esta clasificación se identifica con una letra comprendida entre la A y la E, siendo las naves industriales de tipo A las que presentan una mayor facilidad a la hora de propagar un incendio y las de tipo E, las que ofrecen mayor resistencia.
Naves industriales de tipo A:
Una nave industrial tipo A es aquella que comparte edificio con otros establecimientos ya sean de tipo industrial o no. Estas pueden ser verticales, donde la nave industrial ocuparía una parte o el total de la planta de un edificio, u horizontales, en caso de que la nave se encuentre adosada a otras, compartiendo parte de la estructura.
Si no se cuentan con sistemas eficaces contra los incendios, el fuego podría propagarse con mucha facilidad a los establecimientos colindantes. Por ello el reglamento es más exigente con las naves industriales de tipo A.
Naves industriales de tipo B:
La nave industrial tipo B cuenta con paredes y estructura independientes con el resto de establecimientos industriales colindantes, puede estar adosada o a una distancia inferior a tres metros. Existe también una alta probabilidad de que el fuego se extienda a los establecimientos contiguos.
Naves industriales de tipo C:
En este caso, la nave industrial ocupa totalmente uno o varios edificios y cuenta con una distancia de separación superior a tres metros con el edificio más próximo.
Naves industriales de tipo D:
La actividad industrial se desarrolla en un espacio abierto, que puede estar cubierto de manera parcial o total.
Naves industriales de tipo E:
En este caso, al igual que en el anterior, el establecimiento industrial se sitúa en un espacio abierto que puede estar cubierto de manera parcial hasta un 50% de su superficie.
Ahora que ya conoces los distintos tipos de naves industriales que existen, ya puedes embarcarte en la búsqueda de naves industriales a la venta para encontrar una que se adapte a tu presupuesto y a las necesidades de tu empresa.
Nos leemos!
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